La prevención de riesgos laborales en farmacia es una responsabilidad que no solo recae en el encargado de ventas y gestión del establecimiento. Es necesario que todo el equipo se comprometa con las buenas prácticas en el lugar de trabajo para así poder evitar cualquier riesgo que ponga en peligro la salud y el bienestar de todos los miembros de la farmacia.
A continuación, detallamos cómo funciona la prevención de riesgos laborales en farmacia para que, como profesional, tengas toda la información necesaria para garantizar la seguridad de tu equipo.
La Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales es el marco legal que establece y define en términos generales la prevención de riesgos en farmacia y en otros puestos de trabajo. Esta Ley define claramente los siguientes conceptos:
- Se entenderá por “prevención” las diversas actividades o medidas adoptadas o previstas en todas las fases de actividad de la empresa con el fin de evitar o disminuir los riesgos derivados del trabajo.
- Se entenderá como “riesgo laboral” la posibilidad de que un trabajador sufra un determinado daño derivado del trabajo. Para calificar un riesgo desde el punto de vista de su gravedad, se valorarán conjuntamente la probabilidad de que se produzca el daño y la severidad del mismo.
- Se considerarán como “daños derivados del trabajo” las enfermedades, patologías o lesiones sufridas con motivo del trabajo.
- Se entenderá como “riesgo laboral grave e inminente” aquel que resulte probable racionalmente que se materialice en un futuro inmediato y pueda suponer un daño grave para la salud de los trabajadores.
¿Qué tipo de riesgos laborales hay en una farmacia?
Aunque no existe una norma estándar para establecer los riesgos laborales en farmacia, varios Colegios Oficiales de Farmacéuticos y sindicatos coinciden en una clasificación de los riesgos más comunes del sector. Así, han señalado que los riesgos laborales en farmacia provienen de:
- La ergonomía laboral.
- La seguridad dentro y fuera del puesto de trabajo.
- El entorno de trabajo y la higiene del personal.
Veamos con más detalle cuáles son los tipos de riesgos laborales que existen en una farmacia y cómo identificarlos.
Riesgos relacionados con la ergonomía
Dentro de esta categoría entran los riesgos laborales que están relacionados con la manipulación de cargas y las posturas durante el trabajo. Entre los riesgos laborales en farmacia relacionados con la ergonomía destacan:
- Carga y traslado de cajas pesadas.
- Movimiento en espacios pequeños y estrechos.
- Estar demasiado tiempo de pie.
- Uso excesivo de pantallas de ordenador.
Riesgos relacionados con la seguridad dentro y fuera del puesto de trabajo
En esta categoría se engloban los golpes y caídas ocasionados por malos movimientos y material almacenado incorrectamente en la farmacia. Además de otros peligros para la seguridad del equipo, como sistemas eléctricos, incendios y accidentes relacionados con los desplazamientos en el trayecto al trabajo o de vuelta de este. Los accidentes laborales más comunes en este ámbito son:
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- Caídas por uso de escaleras (en el almacén o estanterías de la farmacia).
- Golpes por material (cajas o paquetes) mal almacenados.
- Accidentes de tráfico o en el transporte público durante el traslado al puesto de trabajo.
Riesgos relacionados con la higiene y medio ambiente
En la mayoría de farmacias se manipulan productos químicos y elementos que suponen cierto riesgo para el bienestar del equipo. Dentro de las actividades de preparación de fórmulas magistrales y preparados, los riesgos laborales más comunes son:
- Vestuario inadecuado.
- Comer y fumar en el laboratorio.
- Trabajar alguna lesión en la piel u otras partes del cuerpo.
Cómo fomentar la prevención de riesgos laborales en la farmacia
Es verdad que la Ley que hemos nombrado con anterioridad brinda a “los trabajadores el derecho a una protección eficaz en materia de seguridad y salud en el trabajo”. Sin embargo, este derecho también “supone la existencia de un correlativo deber del empresario de protección de los trabajadores frente a los riesgos laborales”.
Por eso decíamos al principio de este artículo que la prevención de riesgos laborales en la farmacia no solo es responsabilidad del gerente o el encargado de esta, sino que es una labor en la que deben participar todos los integrantes del equipo de la farmacia.
Si eres el farmacéutico titular o encargado, desde Deiters te animamos a prevenir los riesgos laborales en tu farmacia mediante la implicación de todos los integrantes de tu plantilla. Algunos consejos que te damos son:
- Formar a los empleados en materia de prevención.
- Entregar el correspondiente Equipo de Protección Individual (batas, guantes y calzado contemplados también en el Convenio Laboral).
- Ofrecer un reconocimiento médico voluntario a todos los empleados cada año.