El verano es la estación del año más esperada, ya que es un periodo de descanso, relajación y desconexión de la rutina diaria. Pero cuando se acaban las vacaciones, muchas personas pasan por un periodo de transición psicológico negativo y les cuesta recuperar el equilibrio emocional y el bienestar personal.
Hoy vamos a ver qué es la conocida “depresión post-vacacional”, sus síntomas y causas. Además de algunas claves y consejos para evitar dicho síndrome.
¿Qué es el síndrome post-vacacional?
El síndrome post-vacacional es también conocido popularmente como “depresión postvacacional”. No obstante, pese a que se trata de un desequilibrio emocional, no está reconocido clínica ni psicológicamente por los profesionales.
El síndrome post-vacacional no es más que la ansiedad producida por la readaptación de nuestro organismo y cerebro al entorno y al ritmo de vida laboral, después de haber pasado una temporada sin rutinas ni el vaivén de la sociedad moderna.
Como farmacéuticos, es importante dar a nuestros clientes consejos y buenas prácticas para recuperar el equilibrio emocional, porque si no se controla, este síndrome puede fomentar la aparición de estrés crónico, ansiedad y depresión, en casos más extremos.
Síntomas del síndrome post-vacacional
Los síntomas del síndrome post-vacacional son muy parecidos a los del estrés común. Estos pueden durar entre 2 a 3 días, pero, en los casos más complejos, una persona puede llegar a sentirse con “depresión post-vacacional” hasta más de 20 días después de las vacaciones. Es importante reconocer los siguientes síntomas, para que nuestros pacientes puedan recuperar el equilibrio emocional con más rapidez y hacer frente a posibles complicaciones psicológicas:
- Estrés
- Cansancio permanente
- Insomnio o falta de sueño
- Malestar general
- Sudoración
- Falta de concentración y descenso del rendimiento en el trabajo
- Cambios de humor
Claves para recuperar el equilibrio emocional y el bienestar personal
Nuestro cuerpo y nuestro cerebro suelen establecer rutinas para cumplir con sus funciones biológicas de forma más eficiente. Durante la mayoría de procesos de adaptación, a nuevos entornos y circunstancias, el organismo suele reaccionar con estrés ante los desafíos o demandas. El estrés en sí no es malo y en muchas ocasiones puede ser beneficioso, cuando se evita un peligro, por ejemplo.
No obstante, el estrés crónico producido por el síndrome postvacacional puede ser muy dañino para el bienestar personal y para la salud mental del paciente. Por eso te traemos algunas claves y consejos que puedes dar a tus clientes para que puedan recuperar el equilibrio emocional antes de que sufran alguna complicación psicológica.
Carga de trabajo gradual
Para volver a gestionar la carga de trabajo es necesario hacerlo de manera gradual. Organizarse para que la carga de trabajo sea progresiva los primeros días es primordial para que la carga de estrés no sea abrumadora.
Tomar descansos y aprovechar el tiempo libre
Los descansos para comer o intervalos cortos son muy importantes para que el cerebro se habitúe de nuevo a la cotidianidad del trabajo y para que el cuerpo se mantenga con energía durante un periodo de tiempo más largo.
Dormir las horas necesarias
Descansar correctamente es una de las funciones biológicas más importantes que necesita el cuerpo. Dormir de 7-9 horas cada noche es la mejor forma de prevenir el estrés diario y el síndrome post-vacacional.
Practicar ejercicio físico moderado
Recuperar o crear una rutina de ejercicio moderado también ayuda al cerebro y al sistema nervioso a segregar neurotransmisores que producen la sensación de bienestar y alegría.
Realizar ejercicios de relajación
La meditación u otros ejercicios de relajación son muy buenos para despejar la mente de pensamientos negativos provocados por el estrés y para recuperar el equilibrio emocional.
Tomar complementos alimenticios
Actualmente existen complementos alimenticios que llevan compuestos naturales y principios activos que ayudan al sistema nervioso y al cerebro a hacer frente a los síntomas del estrés y la ansiedad.
En Deiters sabemos que volver a la rutina después de las vacaciones puede tener efectos contraproducentes para el bienestar de tus pacientes y su salud mental. Lo mejor que puedes hacer como farmacéutico es dar a conocer las causas y síntomas de este síndrome a tus clientes y orientarlos con las diferentes alternativas que existen para recuperar el equilibrio emocional después de las vacaciones.